miércoles, 19 de diciembre de 2012

Bendito Pulpo



En estos días que hablamos de record de goles, record de puntos, record de millones... me sorprendió una estadística de un hombre que no suele aparecer en las clasificaciones de los mejores jugadores del mundo: Sergio Busquets ha jugado 201 partidos, entre Liga, Copa y Champions, desde que debutó con el primer equipo del Barcelona... ha perdido 13!!!
Esto, que en el fondo no es más que un frío dato, sólo evidencia una cosa: con Busquets en el campo, el Barça es mucho más fiable.

Como culé, tengo que dar gracias eternas a Pep por el cambio, por el estilo, por los títulos... y por Sergio Busquets. Estoy convencido de que sin este entrenador en el banquillo, con su conocimiento del fútbol base y con su tremenda personalidad, hoy Sergio estaría jugando en algún equipo de Segunda.

Guardiola llegó a un Barcelona triste y con dos años de sequía y no se le ocurrió otra cosa que poner a un chaval de 20 años como jefe de la sala de maquinas, confiando en él por encima de uno de los mejores mediocentros del mundo: Yayá Touré. 

El Barcelona perdió el primer partido contra el Numancia y empató el segundo contra el Racing. Guardiola no se arrugó y Sergio siguió dirigiendo la orquesta.

En el Mundial de 2010, tras la derrota inicial, los palos cayeron sobre Sergio y el problema del doble pivote (junto a Xabi). La respuesta de Vicente del Bosque fue "Si fuera jugador actualmente me gustaría parecerme a Sergio Busquets".

La bendita cabezonería tanto de Pep como de Vicente han hecho que, a los 24 años, Sergio haya ganado 3 Ligas, 2 Copas del Rey, 3 Supercopas de España, 2 Supercopas de Europa, 2 Mundiales de Clubes, 2 Champions League, 1 Eurocopa y 1 Mundial, siendo un jugador fundamental en todos y cada uno de esos títulos. 

Xavi, Puyol, Messi... y renovación de por vida a Don Sergio Busquets.


martes, 10 de enero de 2012

Los nuevos cruzados

"No entiendo como puedes ser del Barça, cuando ellos te desprecian cada vez que celebran algo"

Esta cantinela la vengo escuchando los 4 últimos años con demasiada insistencia. Mis amiguetes madridistas están últimamente tremendamente preocupados por mis colores, y por lo incómodo que nos sentimos todos los culés no-catalano-parlantes. Y tienen toda la razón: el día de la final de Champions, yo estaba deseando que Rooney marcase tres o cuatro chicharros para no escuchar a Xavi, Pep y compañía hablando en catalán. O para que guardaran todas esas banderas catalanas. Es cierto que había también alguna asturiana, o manchega, pero esas no molestan tanto...

A ver si nos enteramos de una vez, que esto es FÚTBOL, y que a mi lo que me gusta es que Messi haga jugadas imposibles, que Xavi dirija con maestría, que Iniesta encuentre huecos que no existen... Y me da lo mismo que lo hagan en castellano, en catalán o en zulú. Dentro del campo no hay idiomas.


Ayer Pep Guardiola ganó el premio al mejor entrenador del año. En ese momento, Pep se acordó de su amigo Tito Vilanoba, recientemente operado y que lo está pasando mal. Y lo hizo en su lengua común, la que ambos utilizan y de la que están orgullosos. El precioso detalle no tuvo la menor importancia. Lo importante fue que Pep nos había ofendido a todos los culés no catalanes. Poco importa que el resto del mensaje lo hiciera en inglés, eso si lo entendemos todos.

Por tanto, no os preocupéis tanto por los aficionados del Barça que no hablamos catalán. Creo que hablo en nombre de un gran número de ellos si digo que me encantaría aprender catalán a base de discursos celebrando títulos y a base de maravillosos gestos como el de ayer de Pep con su amigo. 

Sería una muy buena señal.

lunes, 9 de enero de 2012

Donde dije digo...

Con cada jornada que pasa, tanto leer como escuchar las opiniones de muchos de los gurús de la prensa deportiva. provoca verguenza ajena. 

Cornella, minuto 90 del encuentro entre Espanyol y Barcelona, mano en el área del Espanyol que Turienzo no pita. Rosell fue preguntado por la acción nada más finalizar el partido: "Si el árbitro no lo ha visto, no hay penalti". Guardiola también fue preguntado en rueda de prensa: "Hay que superarlo. Hay que superar en fútbol las posibles cosas. El Barcelona no puede mirar eso sino que debemos mejorar lo que no hemos hecho bien. Desde el primer día lo hicimos y vamos a seguir así"

Esto debería ser lo normal: el árbitro falla en una acción, como el portero dándole un balón a Messi, o como Alexis fallando un control que le deja sólo frente al portero. Fallos. Ni conspiraciones, ni villaratos, ni centralismo... Desde el Barcelona se dio una lección que deberían anotarse los señores de la prensa. Para Sport y Mundo Deportivo, ayer sólo existió la mano de Raúl. Nada más. El áribitro ayuda al Madrid. Los que se quejan del Villarato, ahora lo hacen suyo.


Para Alfredo Relaño, esto no es más que una nueva prueba de que su Villarato está muriendo y que al Barça ya no le ayudan los árbitros. Espero que si el Barcelona gana algún título, no vuelva a argumentar que lo hace porque "siempre juega con red"

Pero aún más gracioso me parecen algunos periodistas de Marca, que piden respeto para el árbitro, quien únicamente ha cometido un error y no por ello hay que crucificarlo públicamente. El ejemplo más claro es Amalio Moratalla, quien hoy dice que "Turienzo no se merece la nevera, ni la masacre, ni el ridículo. Sencillamente fue una jugada muy rápida (...) Bastante penitencia será para Turienzo ver en la tele la jugada repetida y darse cuenta de lo que vimos todos menos él".  
Totalmente de acuerdo con todo lo dicho. Sin embargo, creo recordar que el señor Moratalla era director adjunto de Marca cuando, en portada, Turienzo sí merecía el ridículo y la masacre como consecuencia de sus errores


En fin, esta es la prensa deportiva que tenemos...